jueves, 7 de julio de 2011

Una ultraderecha a imagen y semejanza de la ultraizquierda

Si hay un partido que sea ejemplo claro de ultraderecha, ese es España 2000, y nada más demostrativo de la intolerancia de los miembros de dicha formación que la de sabotear la presentación de un libro. 

Mientras que algunos luchan por la libertad de Pedro Varela mediante el activismo ético, el ejemplo y la coherencia, otros son el fiel reflejo, en el lado opuesto, de la intolerancia del sistema y la ultraizquierda, No, no hay juicios y cárcel, pero sí que hay violencia, otro tipo de violencia. Una es violencia legal e incluso psicológica, y la otra es propia de gente que alterna…con la provocación y la carencia total de Valores. 

La ultraderecha valenciana, intentó reventar la presentación de un ensayo del sociólogo izquierdista y pancatalanista Vicent Flor sobre el anticatalanismo y la identidad valenciana. Yo no voy a juzgar aquí el contenido de la obra, -aunque me puedan repugnar ciertos conceptos- ya que creo en la libertad de expresión, siempre que no incite a actos delictivos que dañen a nuestro pueblo, lo que sí que es deleznable, es no tener más argumentos contra el autor, que las actitudes “torrentiles” que aúnan esperpento y algarada. 

Actitudes, calcadas de la ultraizquierda y que solo benefician al Partido Popular. 
Según relataron algunos medios, cerca de una veintena de ultras de España 2000 y de la extinta formación Coalició Valenciana interrumpieron la presentación del libro, con gritos, insultos a los asistentes y lanzando sillas y ejemplares de la obra que se presentaba. 
La policía, finalmente, desalojó a las personas que estaban provocando los incidentes. 
Luego, los medios de comunicación vincularán a todos los patriotas en el mismo saco que estos… asilvestrados, que son la antítesis de todo comportamiento ético. Les debemos “agradecer” que nos juzguen a todos por igual, y es que, el mismo sistema, adora a gente como ésta, ya que sus actitudes sirven para denostar el buen hacer de otros. Si no entiendes de política, como ocurre con el 90% de la población y te cuentan que 20 personas irrumpen en una sala donde se presenta un libro sobre la identidad Valenciana, que se han puesto a tirar libros y sillas ¿qué piensas de esos 20? ¿Y qué piensas si les llaman patriotas -y se autodenominan patriotas- de todos los que así se llamen?

Si bien, personalmente, el pancatalanismo va en contra de mi concepto de patria, mi patria es un pueblo que entiende que solo la unión de los que damos vida al pueblo nos hace fuertes a nosotros y al conjunto de la nación frente al abuso de otros, y no comparto para nada dichos postulados egocéntricos, falaces y microeconómicos del separatismo imperialista, pero entiendo que la gente es libre de leer y de acudir a la presentación de un libro, por ello exijo el mismo derecho para mi, para mis lecturas y para quienes me las hacen accesibles. Solo desde la coherencia se pueden ganar “guerras”, razones y adeptos. 
Para vergüenza de la enseña nacional, estos ultras -portaban banderas españolas y senyeras valencianas-, gritaban orgullosos “todos a una, puta Cataluña”, es normal que algunos solo tengan en la boca este viejo oficio… pero, insultar, con esa estúpida rima, a todos los catalanes, a compatriotas míos, ya que en él quedan incluidos también aquellos que luchan contra esa idea de “països catalans” y que defienden su identidad, pero también la unidad de España, es algo impropio de alguien que se reclama patriota. Un patriota no insulta una parte de su historia, de su identidad y de su suelo. Tambien dice mucho de esta caterva de indeseables el uso de fascistas y nazis hacia quienes presentaban el libro, fieles hijos domesticados por este corrupto sistema que envenena la historia.

Entre los que han intentado boicotear el acto estaban tanto el presidente de Coalició Valenciana, Juan García Sentandreu, como el líder de España 2000, José Luis Roberto, al que tuve la desgracia de conocer. 
Este tipo de actitudes “torrentiles”, repito, manchan a todos, nos visten a todos del mismo color, y dan razones a censuras, a represiones, y al odio hacia todo lo patriota español. Así que, cuanto más lejos, mucho mejor, por salud y Principios.

Mi total condena y repulsa hacia este tipo de acciones, vengan de donde vengan.

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