A partir del pasado 8 de junio, llevar una camiseta que muestre al Ché, la cara de Lenin o la hoz y el martillo en Polonia es motivo de multa e, incluso, de cárcel.
El Ejecutivo de Donald Tusk ha aprobado una reforma del Código Penal polaco en la que se endurece la represión a la “propaganda de ideologías criminales”
No hay comentarios:
Publicar un comentario